
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, dijo este jueves que a su país «le conviene abrir los vuelos comerciales con Venezuela», suspendidos desde julio de 2024, al informar que recibió de las autoridades chavistas «una carta» en la que se plantea reanudarlos.
«Tengo en mi celular una carta que me mandaron a raíz de lo que usted menciona para reanudar los vuelos. No sé los términos, porque justamente no la he abierto. Lo voy a evaluar con mucho detenimiento de una vez porque, salvo que la carta plantee otros temas que no son de ese propósito, a Panamá le conviene abrir los vuelos comerciales a Venezuela», declaró Mulino durante su conferencia de prensa semanal.
El 29 de julio pasado Nicolás Maduro anunció la suspensión temporal de los vuelos comerciales desde y hacia Panamá y República Dominicana, países ambos frecuentemente usados por venezolanos y ciudadanos de otras nacionalidades para hacer conexiones aéreas ante la baja oferta de vuelos directos desde y hacia Venezuela.
Sobre el estatus de las «relaciones diplomáticas no ha habido nada» nuevo, dijo Mulino al ser preguntado por los periodistas sobre si estas se reanudarían.
Mulino pide ayuda a Venezuela para traslado de migrantes
Al comentar sobre la «carta» que plantea la reanudación de los vuelos comerciales con Venezuela, Mulino aseguró que su Gobierno necesita que el país suramericano «ayude» a trasladar a los migrantes venezolanos que están regresando de Norteamérica tras ver frustrada su intención de ingresar a Estados Unidos.
«Necesitamos que también Venezuela ayude en el transporte de sus ciudadanos que vienen bajando del norte para el sur. Inmigrantes venezolanos que son ciudadanos bien, no son delincuentes, no tienen prontuarios, sino (que quedaron) cogidos en la mitad de un problema, que salieron de su país, se salvaron cruzando por aquí, llegaron hasta donde pudieron haber llegado y ahora vienen de vuelta», expresó el jefe de Estado.
«Les pedí ese apoyo, evidentemente, porque nos es muy difícil a nosotros. Y el número, aunque no lo traje hoy, pero el número va subiendo poquito, no es una masa de gente que está entrando del norte hacia el sur, pero son la mayoría venezolana, eso sí, te lo puedo decir sin lugar a equivocarme», agregó.
El endurecimiento de la política inmigratoria del nuevo gobierno de Donald Trump en Estados Unidos ha provocado que miles de migrantes irregulares, la gran mayoría venezolanos que huyen de la crisis generalizada de su país, retomen el regreso al Sur por la misma ruta que siguieron hacia el Norte, es decir, cruzando Panamá.
El Gobierno panameño vincula la caída del tránsito migratorio hacia el Norte también a medidas como el cierre de caminos en la selva del Darién para habilitar un único «corredor humanitario», la aplicación de multas por entrar de forma irregular al país, y el programa de vuelos de deportación financiado por EE.UU.
El Gobierno de Mulino cerró el pasado 14 de mayo la principal estación migratoria a la salida del Darién tras la drástica caída del flujo hacia el Norte de viajeros irregulares, en lo que supone el fin de una crisis humanitaria que se prolongó varios años.
Con información de EFE